La muchedunbre que bailaba en la pista de baile con Tego Calderón quedó estupefacta ante la aparición de los poetas, que tomaron los instrumentos prestados de la banda de fondo y ofrecieron tres canciones que fueron ejecutadas destastrosamente.
En primer momento, el respetable tomó de buena forma la entrega musical. Unas cuantas palmas entusiastas se hicieron escuchar. Pero grande fue la sorpresa de la banda, que sentía que la masa se iba acalorando hasta llegar al éxtasis, entonces lograron escuchar con claridad, que aquellas pifias eran más fuertes que los acoples de rock. Y los gritos de histeria no eran de fans enamoradas, sino más bien de incomodidad y la petición era al unísono¨: ! Fuera !
Después de unos minutos, ante la euforia de la joven audiencia, los organizadores no pudieron hacer otra cosa que desconectar los equipos, y volver a la canción de Tego Calderón que había sido cortada abruptamente para tamañan exhibición de valentía.
Antes de retirarse del escenario, la banda se despidió cantando su clásico cover "Sufre Peruano Sufre".